Revista EOI

CREAR UN CORAZÓN NUEVO

Un método ingenioso para la creación de nuevos órganos podría revolucionar los trasplantes médicos.

En el laboratorio de biología celular y molecular de Doris Taylor, en la Universidad de Minnesota, un pequeño corazón rosado late en una cámara de cristal, rodeado de una maraña de tubos. Con cada contracción, el extremo inferior del corazón traza un pequeño arco en el espacio, y una solución de color rosa fluye a través de la aorta. Aunque parezca increíble, este corazón viviente fue creado en el laboratorio.

Taylor dirige el Centro Universitario para la Reparación Cardiovascular, donde su equipo ha creado corazones bioartificiales por medio del uso innovador de corazones de animales como andamiaje. Los investigadores empiezan con el corazón de una rata o un cerdo, al que le extraen las células por medio de un proceso químico. Lo que queda es la matriz extracelular, una estructura de carbohidratos y proteínas que mantiene la compleja red de cámaras, válvulas y vasos sanguíneos. A continuación añaden células cardiacas obtenidas de un animal recién nacido e incuban el órgano en un biorreactor, que proporciona estímulos fisiológicos eléctricos y de presión. Al poco tiempo, el corazón empieza a latir débilmente.