Mini-naves espía “hacen sonar” a James Bond
Por Alejandro Agostinelli | Ciencia bruja – mié, 29 feb 2012Desde que fueron difundidos los primeros ensayos, los cuadricópteros se ganaron cierta fama terrible. Por el bajo costo, la precisión y su silencioso andar a ciegas, estas pequeñas aeronaves eran candidatas naturales para misiones de guerra, espionaje o sabotaje. Quizás por eso los ingenieros que las ponen a punto en el Laboratorio de Robótica General, Automatización y Sensores (GRASP) de la Universidad de Pensilvania decidieron hacer que toquen el legendario tema deJames Bond. Y presentaron un video donde, mientras demuestran su delicado vuelo, estas mini-aeronaves "mutitareas" tocan teclados, tambores, maracas, platillos, una guitarra eléctrica y hasta una especie de arpa construida con parte de un sofá y unas cuerdas de alambre, que los pequeños navíos sobrevuelan y "raspan" para obtener un sonido especial.
Estos artefactos que vuelan bajo la advocación del agente "007" fueron presentados por primera vez el 29 de febrero de 2012 en la Conferencia TED2012 en Long Beach, California, por el Vicedecano de Educación y miembro del laboratorio de GRASP, Vijay Kumar. También trabajaron en el proyecto Alex Kushleyev, Daniel Mellinger y Kurtis Sensenig.
Los cuadricópteros son, en verdad, pequeños helicópteros de alas rotativas, llamados así porque son impulsados por las cuatro hélices inclinadas que rotan en sus extremos. Estos cuatro rotores hacen que suban, bajen y se trasladen en un sentido o en otro en forma totalmente independiente. Bueno,no es que estas máquinas tomen sus propias decisiones, sino que son controladas por una computadora programada para seguir ciertas instrucciones, en este caso, tocar en cierto orden una serie de instrumentos musicales. No es fácil maniobrar de otro modo que no sea a través de software. Los movimientos que realizan son prácticamente imposibles de ordenar por un piloto humano, tal como hacen los operadores de avioncitos de radiocontrol. Además, en esta etapa no pueden volar en cualquier entorno. Por ahora sólo lo pueden hacer dentro de habitaciones equipadas con luces infrarrojas y cámaras. Los cuadricópetros captan en forma inalámbrica la información que transmiten las cámaras a cada unidad, y así consiguen "dibujar en el aire" sus precisos cambios de posición.
Los investigadores de la Universidad de Pensilvania ya introdujeron grandes mejoras en su diseño. Cuando los cuadricópteros dejen de depender de una habitación acondicionada para el vuelo, podrán sobrevolar zonas de difícil acceso o moverse en sitios plagados de obstáculos, como podría ser el interior de un departamento. De hecho, ya no se los piensa como "aparatos autónomos".Tienen una suerte de "alma colectiva". Cuando se los envía "en enjambre" son parte de un sistema que, con la coordinación adecuada, pueden ejecutar múltiples tareas a la vez.
El equipo integrado por Gramazio y Kohler y D'Andrea, de la compañía Flying Machine Arena con sede en Zürich, Suiza, acaba de lograr una proeza que aleja más al público de la percepción negativa con que estos insectos mecánicos desembarcaron. Si les dan tiempo, y sus computadoras son alimentadas por un buen diseño, pueden levantar un rascacielos.
El hecho de que sus malabares sean programados por una computadora no les quita capacidad de improvisación, como podemos ver en este peculiar torneo organizado por otro grupo de ingenieros de la misma empresa establecida en Zürich.
Mientras esta promisoria rama de la robótica siga en fase de desarrollo, habrá que ver cuál es el impacto que causan en la industria del cine. Dentro de poco, batallones enteros de estos nano-cacharros, dotados de inteligencia artificial, alimentados por energía solar y con talentos que todavía no imaginamos, serán cosa de todos los días en los nuevos escenarios de la ciencia ficción. Aunque... el parecido de los cuadricópteros a las naves de "La Guerra de las Galaxias" y el mítico videojuego "Space Invaders" no resultan de gran ayuda.
Alejandro Agostinelli es periodista y editor del blog Factor 302.4
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